Fue precisamente en los inicios del largo periodo Megatrixero que A3 se aficionó a dejar series a medias y en especial las de Anime; recuerdo especialmente el caso de Weeding Pitch (aquí traducida como Hada Nupcial, una serie de “Magical girls” tipo Sailor Moon) de la que varias veces emitieron los cuatro o cinco primeros episodios, bien, en realidad primero dieron tres y cada vez que la volvían a empezar añadían uno mas, la penúltima vez creo recordar que llegaron al sexto pero la ultima volvieron a quedarse en el quinto. ¿Motivo de este absurdo juego?, ¿reírse del público, máxime cuando son niños?, ¿sabotear el producto japonés? no creo que ellos mismos lo sepan.
Otra serie inacabada por parte de A3 fue La princesa Sissi, versión animada de la historia de la emperatriz Elizabeth “Sissi” de Austria; coproducción franco-canadiense de 52 episodios que aquí no se emitió al completo.
Otra serie de la que jamás vimos el final fue Flint y los viajeros del tiempo (Jikû Tantei Genshi-kun) de 43 episodios de los cuales A3 no emitió ni la mitad a pesar de llegarnos pasada por el “rasero” americano, es decir: falso opening hecho a base de recortes de capítulos con música estridente donde solo se repite el nombre de la serie una y otra vez, ending igual que el opening pero reducido a un lado para insertar los créditos –solo los de la producción americana– etc.
De la serie Shinzo (en las mismas circunstancias) emitió todo el primer “arco argumental” pero de la siguiente parte ya no supimos nada.
A la izquierda los personajes de Flint preguntandose porque no dejaron acabar su serie; a la derecha el protagonista de Shinzo intentando sobornar al director de programación para que dejase continuar la suya.
Hay que reconocer que si A3 es especialista en series de nunca acabar también lo es en series si acabar.
Cosas:
Muchas series japonesasa pasadas por las barras y estrellas nos llegan en este triste estado. Medabots, Monster Rancher, Dinosaur King (por el momento inacabada por Boing), o la mismísima Pokémon son solo algunos ejemplos
Naruto también ha sufrido diversas agresiones de este tipo. La primera temporada nos llegó con un opening falso y horripilante, las siguientes conservaban el original pero con los créditos mal borrados (si uno se fija puede ver las marcas borrosas). Al fin, en las últimas, decidieron dejar los créditos. Esto es lo que pasa al comprar las series a través de E.E. U.U. claro que luego aquí las acaban de “arreglar”.