lunes, 2 de enero de 2017

Modelo de princesa

Es curioso comprobar como el reciente fallecimiento de Carrie Fisher ha desatado más polémicas que duelo y es que a cuarenta años vista de la primera película de la saga, lo único que parece importar de la interpretación de la Princesa Leia es el famoso Bikini Metálico, el cual tiene entrada propia en Wikipedia.

Carrie Fisher se convirtió en un icono, y a muchos niveles, cuando con diecinueve años interpretó a la princesa Leia en la saga original de La Guerra de las Galaxias. La indiscutible protagonista femenina a quién ni su madre Amidala pudo desbancar.




Carrie, con sus veinte años, aparecía esplendida tanto con el uniforme militar, como con el bikini o con su túnica principesca. 
Un gran mérito en una época en que las actrices no eran las despampanantes morbosas que vemos actualmente en la pantalla. Y es que si repasamos las protagonistas de esos años en películas como Conan el Barbaro, Indiana Jones, Robocop, Terminator o Los Inmortales, tendremos que reconocer que no eran las súper modelos que ahora se exigen para adornar cualquier película.



Su bikini metálico aún sigue dando que hablar y más que nunca en las fechas de su fallecimiento, en las cuales una cierta marca de lencería nos ha regalado estas navidades y con más fuerza que nunca, con la exhibición de la modelo Irina Shayk. 

Si interpretamos maliciosamente el anuncio, podemos decir que la modelo es "uno más del montón de regalos" envuelto con su "lazo" (la lencería) del mismo color de las cintas.


¿Es quizás porque al bikini hemos de sumar el hecho de que estaba encadenada? Seguro que en la década que será recordada por 50 sombras de Grey y todas las mujeres que lo han aplaudido -mucho más que los hombres- podemos ser condescendientes con la icónica imagen de película de los 7o's.



¿En qué piensan las mujeres?

Ah, pero claro, hemos de resaltar que Leia estaba encadenada contra su voluntad...

Siguiendo el pensamiento de la propia actriz, que en uno de los varios tuits que le obligaron a publicar a causa de la absurda polémica  dijo al respecto que llevó esa indumentaria y esa cadena solo hasta que mató a Jabba “con esa maldita cosa” (la cadena) y junto con otra de las muchas “polémicas” como que ella no hablaba en todo el tiempo que está encadenada, podemos imaginar a la princesa de Alderaan mostrándose sumisa mientras trazaba un plan y esperaba el momento oportuno para ejecutarlo.

Así mismo vemos que Jabba el Hutt es una babosa gigante, alegoría de todos los vicios y maldades.
La forma real de todos los Grey, que veríamos si todos ellos tuvieran su respectivo Retrato de Dorian por mucho que se escondan tras un traje de alta costura.

Ya de nuevo en el plano fílmico, sabemos que Fisher declaró que el dichoso bikini le iba pequeño (cosa difícil de creer si nos fijamos bien en la foto, ya que a penas lo llena...) y fue para ella una tortura llevarlo, más en el aspecto puramente físico que en ningún otro ya que según dijo, le hicieron adelgazar para lucirlo, pero eso no es por ser mujer o porqué fuera una pieza “sexualizada”.

-La historia de Holliwood está repleta de esos casos en que tanto hombres como mujeres fueron obligados a ganar o perder peso en función de su papel y aún cosas peores; A Greta Garbo le obligaron a operarse para quitarse sus dientes naturales -perfectamente sanos pero “desiguales”- y a llevar dentadura postiza desde los veinte años solo para poder ser una estrella-

Malo sería que ni la actriz ni el personaje fueran recordadas solo por este atuendo pero si las extremistas fueran inteligentes verían en Leia y su victoria sobre Habba, la alegoría perfecta de la liberación de la mujer de las cadenas del macho opresor. Que más da que fuera en bikini, aún mejor.



No es justo el linchamiento mediático que han sufrido tanto las figuras y el “merchandising” como aquellos que han usado esta imagen que no hace sino resaltar la belleza de la actriz. Y es que los actores y actrices se venden por su imagen.

Unas imágenes que cubrieron las carpetas, forraron libros y decoraron paredes de los adolescentes de los 80's, regaladas por revistas como Super Pop, ClanTv, Pronto o Tp.


Siendo pragmáticos podríamos decir que la señora Fisher comió toda su vida de su papel de Leia, el cual incluía, guste o no, la -ahora inexplicablemente- polémica escena. Porque, reconozcámoslo, y con todo el cariño que los aficionados y seguidores sentimos por ella, si hubiera sido por los papeles que tuvo después y dados sus problemas personales, habría sido una de tantas secundarias que desfilan por la pantalla sin que nadie les recuerde. 
Por eso estuvo asistiendo a las convenciones de seguidores y peinándose sus famosos moños estilo "Elche" hasta el último año de su vida.


Pero el caso es que su imagen -ahora que ha fallecido, más plenamente que nunca- pertenece a Disney y eso, aunque parezca que no, es muy decisivo a la hora de forzar una readaptación psicológica de la imagen de la saga -hoy mas franquicia que nunca- y de sus protagonistas.

Ahora, con la muerte de la actriz, Leia Organa ha pasado a ser una “princesa Disney” más y eso significa montarse en el carro de las exigencias de la alienada sociedad que nos están obligando a aceptar y quitarle su esencia, su carácter, que la hacía toda una mujer, fuerte, valiente, luchadora y por supuesto femenina y hermosa, y convertirla en un estandarte más del Imperio...si les dejamos.






Adel22

 Vídeo-homenaje a Carrie Fisher en el canal de vídeo del blog.