Todos en mayor o menor medida vemos cine: Incluso hubo momentos( y todavía sucede) en que el cine fue maestro, “live motive” o nuestro “patrón de comportamiento”
Sin embargo hay filmes que pasan desapercibidos para el gran publico o “ vulgo” como por ejemplo “ la Puerta de Rashomon” .
No soy una “friki” del cine japonés , aunque si podría declarármelo del cine de Kurosawa, cuyas películas son harto famosas y todas ( en mi humilde opinión) inmejorables pero está que hoy nos ocupa es de revisión e incluso requetevisión pues es un auténtico mosaico de la humanidad, donde en solo tres personajes centrales se describen todas la bajas pasiones y todos los egoísmos del se humano, al mismo tiempo que lo más elevado que puede encontrarse en el alma humana.
Respecto a la puesta en escena aun careciendo de los más elementales medios económicos, y desde luego obviamente de medios técnicos , es magistral ( ya que esa puerta es el nexo entre el mundo, el infierno y el cielo).
La pertinaz ( ja, ja, ja, hasta politizamos la palabras) lluvia ( que no cesa hasta el final, en donde algo muy similar al arco iris nos redime de alguna manera) es todo un sentimiento de nostalgia por todo lo perdido.
En fin, una película magistral en la que no hay sexo, violencia ni política -explícitos- y que sin embargo mantiene atento al espectador inteligente, hasta el final, que te deja mucho que sentir, meditar y cavilar durante mucho tiempo después ( yo escribo esto cinco años después de haberla visto por tercera y [no] última vez).
Escenas a destacar:
Cundo los tres principales “protas” están sentados en la puerta comparando sus sentimientos.
La escena de la “médium”.
La de la mantita del bebé.
...Y mogollón más ( por que es destacable toda ella).
¡En fin! Amantes de Kurosawa ¡AL PODER! y no os dejéis insultar ni pegar.
( Lo siento también me gustan algunas de Bergman).
Consejo: vedla, revedla y requetevedla. ( si puede ser en tardes de lluvia )
Cosas:
Atención especial al tandem Kurosawa-Mifune, su actor favorito de una versatilidad increíble, y si no fijarse en lo metamórfico que llega a ser en sus distintos papeles : Vivir, Los siete samuráis, La puerta de Rashomon etc...pues pasa del mendigo más bruto e informe, al moribundo más chiquito, flaquito y desgraciado.
La Mariconsejines
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